24 may 2016

VIVIR EN LIBERTAD


Pequeño extracto de la obra de este touareg, en la que reflexiona sobre sus experiencias en la ciudad:

¡Es tan extraño que las necesidades que tan urgentes nos parecen sean vitales!


Un día me llamó una amiga mía llorando porque no le funcionaba el televisor y carecía de dinero para comprarse otro. Le pregunté si el problema era verdaderamente esencial. No supo qué contestarme. Hay una enorme cantidad de conflictos inútiles que nos ocupan demasiado sitio. Debemos siempre intentar ahorrar en acciones y en preocupaciones. Por pocas cosas en la vida merece la pena sentirse desgraciado.

Para los nómadas, cada gesto es esencial. No tenemos derecho a estar distraídos. Una torpeza puede hacer que se derrame el agua de un cántaro, y eso, en pleno desierto, es grave. Los días de mucho calor o de tormenta, cada gesto que hacemos puede costarnos muy caro. Ésa es la razón por la que hemos aprendido enseguida a limitarnos justo a los indispensable. Una falta de atención puede conllevar resultados fatales. Todo cuenta. Lo inútil no tiene ascendiente sobre nosotros.

 Kashba de Äit Ben Hadou

Esta forma de enfocar el mundo que nos rodea se refleja en nuestra relación con la vida en general: no nos cargamos demasiado. Por ello mismo, me sorprendí mucho al descubrir que en los países occidentales, que tan ocupados parecen, se sobrecargan hasta tal punto de cosas inútiles.




<<En el desierto no hay atascos>> , de Moussa Ag Assarid

28 mar 2016

LOS NÓMADAS DEL SIGLO XXI

Parecía que la rapidez de los transportes y el acceso a las tecnologías de la comunicación dibujaban vidas en movimiento para los seres humanos del nuevo siglo. Parecía que las fronteras se difuminaban, que cambiar de país por trabajo o placer ya no era un problema. Parecía que dolía menos echar de menos a la familia: Internet iba perfilando ese horizonte en el que mensajes instantáneos, fotografías y vídeos acercan a las personas como nunca antes había sido posible.
Parecía, según decían los expertos, que nos íbamos a volver otra vez nómadas, que esa era nuestra evolución natural.

Y sin embargo, la sociedad nómada de hoy lo es por otras razones.

Quitando a las comunidades que continúan con una forma de vida nómada como han hecho siempre, en función de las estaciones, las demás lo hacen por una causa muy distinta.

La guerra  y el hambre son las principales causas de movilidad en el planeta, aunque no siempre se trata conflictos declarados. Y todas sus víctimas, se llamen como se llamen, son siempre refugiados, ya que buscan cobijo por una causa de fuerza mayor.

En 1984 el fotógrafo Steve Mc Curry retrató el hermoso rostro de una niña en Pakistán. Ni él ni aquella muchacha anónima sospechaban entonces que la fotografía daría la vuelta al mundo al convertirse en la portada de National Geographic. 
Fue así como Sharbat Gula, que así se llama la niña ya convertida en mujer, pasó a la fama sin saberlo y siguió su camino para salvar su vida. Cuando se hizo la foto, Gula se encontraba en la escuela del campamento de refugiados de Nasir Bagh, que acogía a los afganos que habían huido de la guerra entre su país y la URSS.


Imagen de Sharbat Gula a los doce años.

Casi treinta años después, Mc Curry se lanzó a la búsqueda de Gula: quería saber si había sobrevivido, dónde había ido, cómo vivía ahora. Finalmente Mc Curry y su equipo la encontraron en su pueblo natal de Afganistán. Ella relató cómo había sido la huida. Volvió a ser fotografiada y a aparecer en la portada de la revista: no había vuelto a posar para nadie y desconocía por completo que su rostro era conocido la fama que había alcanzado.

Esta es solo una de las muchas historias de los que huyen de la guerra, del fanatismo, del horror de una forma u otra. Miles de personas han visto su cara, se ha impreso en papel, circula en Internet, se han hecho dibujos en varios formatos, como si se banalizase la situación.

No sabemos hasta qué punto las nuevas migraciones modificarán para siempre el mapa humano que conocemos.

La crisis de los refugiados sirios a las puertas de Europa, en la que se cuelan los también refugiados de otras nacionalidades, no es más que un toque de atención a la parte rica del planeta. Los medios de comunicación (y aquí se pueden incluir los blogs) somos también responsables de contar bien estas historias. De ir más allá de una niña de ojos impresionantes en la portada de una conocida revista o del testimonio amarillista de algunos afectados. No acostumbrarnos a ver esto, ni a consentirlo. Narrar el día a día no solo de los que se han visto forzados a huir, si no, como pasa casi siempre, de las situaciones previas a esa marcha forzada, de los miles que pasan hambre y tarde o temprano también emprenderán el camino, de todos los que viven esquivando las balas que nuestros mismos gobiernos venden, los mismos que nunca tendrán un titular con nombre ya que serán meras cifras de algún país desarrollado.



El Mediterráneo atarcede: en los últimos años sus aguas se han convertido a veces en la cuna que regala una nueva vida a los inmigrantes y otras han mecido su último aliento.

Tal vez el primer paso sea educarnos nosotros también: conocer los países de África, de Asia, de América, de Oceanía, estudiar su historia y la relación que guarda con la nuestra, considerar sus movimientos migratorios y de refugiados como algo más que nos viene bien para que nos puedan pagar las pensiones.

Irónicamente la era digital, en la que se desdibujan los valores, las estructuras y los hábitos, el ser humano sigue siendo el mismo. Nómadas a un lado de la pantalla y al otro, pero personas al fin y al cabo.

Hasta que no entendamos esto no podremos cambiar nada.




12 mar 2016

SEMILLA

<<TRATARON DE ENTERRARNOS...




  NO SABÍAN 

                           QUE ÉRAMOS SEMILLAS.>>


25 sept 2015

LA OTRA CARA DEL PATERNALISMO


-¿Sabías que los niños en Norte América son obligados a sentarse en aulas durante todo el día? 
Y si se mueven, se emocionan o hacen mucho ruido, les dan drogas para que se estén quietos.
Casi todo el ejercicio físico que hacen es por jugar a vídeo juegos y la mayor parte de su comida es falsa y llena de peligrosos contenidos químicos.

-¡Eso es terrible! Deberíamos recoger donaciones para ellos.



8 ene 2015

RIADS, LOS HOSTALES ESCONDIDOS

Quien camina por las ciudades de Marruecos tienen una amplia variedad de alojamientos, la mayoría baratos a los ojos (y sobre todo al bolsillo) del viajero occidental. Más allá de las casas particulares para quien tenga amigos allí y de los flamentes hoteles de cuatro y cinco estrellas, existe una modalidad para mí antes desconocida, a caballo entre la pensión, la casa particular y el hotel tradicional. Se trata del riad.

Los riads son casas dentro de la medina con un patio interior (tipo andaluz), en las que se alquilan habitaciones por un módico precio la mayoría de las veces. Hago este apunte porque lógicamente hay de todo y dependiendo de la calidad del servicio y las habitaciones, así será el precio. ¿Cuánto? Lo normal suelen ser unos diez euros por persona.

Hasta aquí nada nuevo. Y es que la magia de los riads está en el encanto de vivir durante unos días en una verdadera casa decorada, con patio y vistas de toda la ciudad, pues están en el mismo centro. Camuflados en las laberínticas callejuelas, la mayoría pasan absolutamente desapercibidos entre el gentío. A veces un cartel escrito a mano, o pintadas de flechas con spray en las paredes indican el camino hacia la entrada. Pero cuando la puerta de uno de estos hostales se abre, se abre también un mundo insospechado al otro lado de la pared. Unos techos enormes cobijarán al viajero los días que esté allí, y podrá elegir desayunar, comer y cenar la cocina más tradicional.

Reconozco que yo no me alojé en ningún riad (lo tengo pendiente), pero sí llegué a entrar en algunos. Normalmente tienen dos plantas y una azotea. La mayoría tienen WIFI en todo el edificio y cuentan con servicios extra, como taxi hasta la estación o excursiones.

Son una opción muy interesante para quien busque alojarse, tener comodidades y buenas vistas por un precio razonable. No son tan básicos como un albergue para mochileros pero tampoco tan abrumadores y caros como los hoteles. Aunque vuelvo a repetir: todo depende de qué tipo de servicio se quiera. Se encuentran en el casco histórico, por lo que son ideales para visitar la ciudad sin medios de transporte. Además hay muchísimos, no suele haber en conseguir una habitación si no se ha reservado con tiempo.


                                                Vista de la ciudad de Fez desde la azotea de un riad

Recomiendo por todo ello que si pensáis visitar Marruecos no dudéis en callejear por las medinas de sus ciudades: miles de de hoteles de este tipo os esperan camuflados entre el gentío, los mercados y la cotidianidad; precisamente ahí reside el encanto.

2 ene 2015

FEZ: MARRUECOS IMPERIAL Y MEDIEVAL

¿Y qué sabía yo de Fez?

Se va dibujando para el recién llegado como una nube verde en medio el paisaje cambiante marroquí.

Verde por el color de sus tejados, es el color que caracteriza esta ciudad que un día fue capital de un imperio. Medieval, turística, tradicional y amurallada. Las miles de callejuelas laberínticas desafían a quien ose creer que los mapas y GPs no harán que se pierda.

Vista de Fez

Fue capital del imperio y por ello es turística. Amada y romántica para muchos, lúgubre para otros. Pero que nadie se engañe: sigue siendo el centro espiritual de Marruecos y el respeto a la tradición y las costumbres se respira por los cuatro costados.Presume de ser el centro cultural y religioso del país (no en vano en junio se celebra entre sus murallas el festival anual de Música Sacra, todo un acontecimiento).

Fez es una ciudad que impacta. En sus calles se siguen practicando los oficios de antaño: la orfebrería, la elaboración del cuero artesanal, las alfombras y los telares, la cerámica, la cosmética... Aparece como un viaje a los libros de historia para el viajero occidental, y la vida de sus habitantes desenvuelve en la rutina cotidiana del día a día: el mercado en cada calle, los niños que ríen sin parar entre la multitud,  el barrio de la universidad, los burros que transportan mercancías por las angostas callejuelas...¡Balat, balat! (significa "¡Cuidado!" en árabe).

En primer lugar tengo que decir que Fez es enorme. Podríamos dividirla entres partes principales:  Fes- el Bali (la parte antigua), Fez el- Jdil (la medina nueva donde está el barrio judío) y la parte nueva (también conocida como "Ville Nouvelle"). 
Sí, el viajero interesado en hacer turismo por los cuatro lugares señalados en el mapa pensará que exagero, pero lo que no sabe quizá este viajero es que más allá del centro histórico se encuentra la llamada parte nueva de la ciudad. La parte nueva de Fez es una de las más grandes de todo África y es aquí donde se ubican los edificios más occidentales, las escuelas de negocios.




QUÉ VISITAR

-En Fes- el Bali y es donde se encuentra la medina, el centro histórico. Aquí están los distritos de los oficios ya mencionados, y se pueden visitar uno por uno viendo cómo es el proceso de hacer los telares o elaborar el aceite de argán para cosméticos. La plaza central en la que estos se unen es la Seffarine.  Se puede ver hombre trabajando el cobre como se hacía antes.
También se encuentra la mezquita Karaouine. Es la segunda más grande del país, sonde sólo pueden entrar los musulmanes y alberga la universidad más antigua del mundo.
El Museo de la Madera es una muestra de la delicada artesanía hecha en este material, toda elaborada a mano. Esto se puede apreciar igualmente en la Madrasa Attarine, muy decorada y bien conservada, que servía de lugar de estudio.


                                                                           Curtiduría



                                                                        Hombre tejiendo fulares

-Fez el- Jdil, era también conocda como "la ciudad blanca", fue la sede del poder y es ahí donde se ubica el Palacio Real. Sólo se puede visitar el exterior, donde se ven sus siete puertas de bronce.
También aquí está el Mellah o barrio judío, cuya característica más llamativa son los balcones con rejas, muy distintos de los musulmanes.


                                                                               El Palacio Real


                                       Detalle de los balcones judíos. Foto sacada de www.fez.net

- La parte nueva: Simplemente gigante. Sí, el viajero interesado en hacer turismo por los cuatro lugares señalados en el mapa pensará que exagero, pero lo que no sabe quizá este viajero es que la parte nueva de Fez es una de las más grandes de todo África y es aquí donde se ubican los edificios más occidentales, las escuelas de negocios, heladerías, restaurantes, cafeterías y centros comerciales.

La mayoría de estas visitas ese hacen con un guía oficial de la ciudad. Si queréis hacer una visita guiada en español os recomiendo desde aquí a la guía Milouda El Ouzzani; es una mujer culta y divertida, amable y paciente con sus explicaciones, os descubrirá todos los encantos de cada calle y responderá a vuestras dudas de una forma muy profesional. Si queréis contratar sus servicios estos sin sus teléfonos 00212618045512 / 00212660795102  y este su e-mail: milouda66@hotmail.com y milouda1_maroc@hotmail.com. 

La ciudad verde tiene muchos rincones por descubrir y esos los iré contando en otros post, ya que se hace imposible desgranar uno por uno todas callejuelas y experiencias que ofrece. Ciudad receptora de moriscos expulsados, crisol de culturas y cuna de la espiritualidad marroquí, mil riads se esconden en sus laberintos. ¡Hasta el próximo!



21 dic 2014

SOLSTICIO DE INVIERNO, FELIZ CICLO NUEVO

Otro año más, renacemos. La tierra gira y se renueva su naturaleza. El Sol y ella se encuentran ( de manera que en la eclíptica el astro rey alcanza su posición más austral) de manera que se vuelve a iniciar el nuevo ciclo.

Ya sabemos que la Navidad es la época en la que recibimos el cambio de año, concretamente el día 31 de diciembre, pero mucho antes de esta celebración, de este calendario, el hombre se guiaba por lo instintivo; pero también por lo medible. 
Las horas de sol significaban (y me atrevo a decir que aún sigue siendo así) vida. Marcaban el ritmo de ésta, el ánimo, las actividades. Y su reducción o incremento era algo de suma importancia en las vidas de nuestros ante pasados: se dieron cuenta que en eso que nosotros llamamos "invierno" se empezaban a alargar las horas de luz que desde el verano cada vez eran eran menos. 
Y se dio cuenta de que cuando se producía el solsticio de invierno, se producía el cambio. A partir de la noche más corta del año, las horas de luz de los días siguientes eran cada vez más largas.



Newgrage, en  Irlanda, es un yacimiento que data de la Edad de Piedra. En los años 60, por casualidad, se descubrió que durante el solsticio de invierno se ilumina el suelo de la cámara durante casi 20 minutos. Puede que no parezca nada del otro mundo hoy, pero que esto sólo se produzca una vez al año  no es casualidad y lo más probable es que esta obra se construyese para honrar precisamente al solsticio y al cambio de estación.


                                                               Vídeo sobre Newgrage, en  Irlanda

No puedo olvidar en este post la música de Vilvaldi. La verdad es que estaba deseando escribirlo, entre otras cosas por compartir mi favorita, el "Invierno". Espero que lo disfrutéis. 


Así que ya puedo decir desde aquí: ¡Feliz solsticio! ¡Feliz invierno!, y , por qué no ¡Feliz año!

14 dic 2014

NÓMADAS

El nombre de este blog no es algo casual. A mí me suena bien, pero sé que no era el mejor nombre para especificar de qué iba a hablar. Sólo sabía que la palabra "Nómada" tenía que estar incluida en el nombre.

Siempre me he interesado, sin saber muy bien por qué, por las culturas nómadas. Y es que al margen de estar al margen de las normas aceptadas para la mayoría, tienen algo más. Y cuanto más voy conociendo sobre ellas y sobre todo, cuando más he "nomadeado" yo misma, más entiendo esta atracción, más forma le voy dando a este interés que en forma de intuición me ha hecho descubrirlas.

 Los nómadas son gente sin miedo, parece mentira que nosotros, que nos hemos adueñado de un espacio artificial y somos sedentarios (con las reducidas opciones que eso nos deja), tengamos tanto miedo. Miedo a perderlo todo, o al menos esa ilusión que llamamos "todo". Porque lo único que tenemos es nuestra vida.

Tenía na profesora de danza decía que el movimiento es la vida. Y tenía razón,. Porque la mayor falta de movimiento se produce al morir, es entonces cuando el cuerpo se queda absolutamente rígido; mientras que la vida es siempre fluir, cambiar de posturas, ir arriba y abajo y volver a saltar.


                                                 En el desierto del Sáhara sigue habiendo nóamdas

Es curioso ver como todas las culturas nómadas se mueven, son libres y se relacionan con el territorio y las personas que se van encontrando, pero a la vez tienen unas tradiciones muy arraigadas en su cultura, a veces injustas. Para mí esto es una metáfora preciosa de la vida: todos tenemos que movernos, tenemos ese derecho y obligación, y para ello necesitamos mantenernos en nuestro eje, defender y creer en nuestras propias convicciones.
Un exceso de auto- normas y creencia en nuestras verdades haría que no nos relacionásemos, y un exceso de fusión con los demás. que perdiésemos nuestra personalidad.

Además, el nómada tiene que ir ligero de equipaje. Sólo lleva encima lo que necesita. Y es que el peso es enemigo del movimiento. Agarrota y estropea la espalda por un lado, y por otro, el miedo a que se rompan las cosas , paraliza. El nómada va ligero y sabe que si aquí no encuentra algo lo encontrará allá, confía en sus instintos y en lo que puede encontrar, en el futuro.

Moverse es sinónimo de aprender. Lo saben muy bien los bebés cuando empiezan a andar de forma instintiva, se caen, gatean, pero vuelven a probar y a caerse hasta que sus pasos empiezan a ser firmes: en todo este proceso nada ha sido en vano, los músculos se han ido fortaleciendo mientras intentaban moverse una y otra vez, mientras aprendían a controlar su peso y a relacionarse con el entorno.

Quiero compartir aquí las impresiones de otra bloguera, Bárbara, quien desde su blog "Bárbara on the road" cuenta su vida nómada en pleno siglo XXI. En esta entrada concretamente narra lo que le ha enseñado llevar este tipo de vida http://unviajedemilesdekmempiezaconunpequenopaso.wordpress.com/2014/04/27/que-me-ha-ensenado-el-nomadismo/ . En sul blog rescata una frase del libro "El Imperio" del  periodista Ryszard Kapuscinski: “Para el nómada, el pasar a la vida sedentaria siempre fue el ultimo recurso, una derrota vital, una degradación. No conoce el precio a la hora de pagar la libertad“.


"Latcho Drom", documental del director Toni Gatlif, que narra la travesía del pueblo gitano a través del arte, la música a y el baile

Creo que en fondo los instintos que guían a los nómadas son los mismos que seguimos llevando todos en nuestros día a día. Aunque creamos que no dependemos de las estaciones, ni de si hay comida en esta zona o en esta otra, o de si debemos migrar en función de adónde vuelen los pájaros. Son instintos muy básicos que sólo salen a la luz en los momentos clave. Son los instintos que van al mismo sitio, a hacernos lo que somos. Es el instinto del aprendizaje continuo.

13 dic 2014

CARTA A UN PERIODISTA DESMOTIVADO

Comparto la respuesta que Álvaro González, periodista de viajes y fotógrafo, dio en su blog a otro compañero de profesión desmotivado por la monotonía, rutina y sinsentido de su trabajo periodístico (lo podéis leer aquí: http://www.viajesrockyfotos.com/donde-se-fue-el-periodismo/ ).

La respuesta me pareció  muy acertada, llena de ilusión y positivismo, pero también de realismo. Creo que todos y especialmente los que no llevamos tanto tiempo trabajando en ello, pero ya hemos visto cómo el periodismo "administrativo" se come nuestros días, deberíamos tomar nota.

Hoy la he rescatado y la comparto con todos vosotros:

“Querido amigo,

El periodismo no se ha ido, está ahí fuera. Sal a buscarlo y muéstramelo. Está esperando que te reencuentres con él  y que lo acaricies, que le digas cosas bonitas y lo utilices. Hazlo. Ve, escucha, graba, apunta, fotografía. Luego, vuelve y cuéntalo; como me decía el maestro Enrique Meneses. Tu voz se escuchará, estoy convencido. Si lo que cuentas es bueno, florecerá con poco que lo riegues. Practica, escribe, haz fotos, videos, ilustraciones….lo que te guste/apetezca/sepas hasta que te salgan callos. Pero sal y hazlo. No lo intentes, hazlo. Principio y fin.Hazte un blog, empieza a publicar, tus historias se verán en todo el mundo. Será tu mejor escaparate, haz que las joyas brillen tanto en él que atraiga la vista de todo el mundo. Vístelo de manera espectacular pero sencilla. Y publica, publica, publica…Piensa, no hagas caso de los gurús que te prometen artículos en 5 minutos. Serán una mierda, seguro. Escribe, escribe, escribe…Corrige, corrige, corrige…..Edita, edita, edita….Me da igual fotografía, vídeo, texto, dibujo, infografía….o todo junto, pero sé original, aléjate de lugares comunes que sólo te llevarán a la mediocridad, la peor de las condiciones humanas. Estudia, lee, devora a los clásicos de la fotografía, de la pintura…aléjate de lo mediocre o acabará engulléndote.Confía en tu trabajo, no es menos que el de otro. Apunta alto, muy alto. ¿Qué es lo peor que puede ocurrir? ¿Qué te digan que no? Eso ya lo tienes, no es nada nuevo ¿Que tu trabajo no interesa? Pues a continuación preguntales el porqué. Si te responden con argumentos tendrás de donde tirar, sabrás hacia donde ir. Si te dicen que tu trabajo es una mierda, sigue insistiendo. En el fondo les interesa pero quieren ver más, quieren saber si puedes crecer.Planteate proyectos locos. Tranquilo, luego se volverán factibles. No comiences con menudencias sino con la experiencia de tu vida, la que estás deseando hacer. Planteála y ve a por ella. Probablemente no la consigas a la primera pero te servirá para alcanzar otras metas, más inmediatas y que no sabías ni que existían.Rodéate de gente con tu misma inquietud. Te pondrán los pies en el suelo y al mismo tiempo te motivarán más que nadie. Te comprenden. Sé crítico. Fundamenta tus opiniones y aléjate del todo vale. No te creas inferior a nadie, tampoco superior. Hazte respetar. Eso se consigue trabajando.Olvídate de los consejos de los amigos, intentarán quitarte de la cabeza tus proyectos locos. No te entienden. No te esfuerces para que lo hagan. Pero cuando vean que se han hecho realidad querrán apuntarse al carro. No te preocupes, es normal.No hables de algo que no hayas terminado, te restará seguridad y hará que lo vayas aplazando.Ajusta tus gastos. Quita todo lo superfluo. Aprende a vivir con lo fundamental. Habrá para caprichos, no te preocupes. Pero todo a su tiempo, es necesario empezar de cero. Mientras haya un duro en tu cuenta no te esforzarás. Pero cuando sientas el aliento de las facturas en el cogote tu ingenio se multiplicará y tu visión se ampliará.Véndete, añade un poco de marketing a tu trabajo y toma las redes sociales como si te fuera la vida en ellas. Date importancia: la tienes. Valórate, puedes aportar mucha riqueza a este mundo.No pienses en pequeño. Vete de España, aunque sea virtualmente. Eres un ciudadano del mundo, no de un minúsculo país. Métetelo en la cabeza. Prueba a vender tus historias en Alemania, Estados Unidos, Colombia, Vietnam, Australia…Internet es el mejor billete que existe. Busca salida a tus trabajos. Tendrás que hacer mucho pero te ayudará a ir creciendo. Propón historias. Rechazarán las 20 primeras….no te preocupes, te comprarán la número 21.Ahorra, viaja, busca la complicidad con el ser humano, verás las historias interesantes cuando salgan a tu encuentro. No te preocupes están ahí, esperando.Quiero que me cuentes qué has visto. Vamos, tómate tu tiempo pero no tardes demasiado…Invítame a pasar dentro de tus relatos: quiero saber si una madre alemana quiere igual a su hijo que una en Etiopía, si la sonrisa de un niño mueve el mundo con la misma intensidad en Perú que en Australia. Acompaña a un agricultor de la Mancha y haz que me pierda entre la cebada agitada por el viento. Llévame al interior de un monasterio budista, muéstrame que tienen el mismo miedo a morir que yo. Siéntate junto al Duero, lee a Machado, escucha a Gabinete Caligari. Dime qué sientes, escupe las palabras, sin pensar, desde las entrañas.Y, sobre todo, toma las riendas de tu destino. Decide tú. Te equivocarás, seguro. Es necesario que fracases. Que eso no te frene, sino que te aliente a continuar con más fuerza. Pega a todas las puertas de las casas en las que quieras entrar. Llama, no te cortes. Al principio no te abrirán o te preguntarán qué quieres, después serás uno más de los invitados a al fiesta.A pesar de todo lo anterior, debes saber que engordarás, perderás el pelo y te harás viejo, pero el camino habrá merecido la pena.”





10 dic 2014

BAJARSE AL MORO

En España se popularizó en los años 90 la expresión "bajarse al moro" en referencia al hecho de ir a Marruecos a comprar o consumir hachís. Se hicieron una obra obra de teatro y una película bajo este título.Y es que el cultivo de esta droga estuvo permitido en Marruecos hasta hace no mucho.

No es de extrañar que muchos españoles relacionen Marruecos con hachís, con droga, con una especie de mercadillo en forma de un país del que desconocen todo lo demás. No en vano en algunas regiones se ha vivido durante mucho tiempo de esto, aunque hoy es ilegal.
Es tristísimo ver cómo toda la historia, la cultura, la gente, los hábitos distintos de los nuestros (y otros no tanto) pasan totalmente desapercibidos antes los ojos de quien no conoce más que lo que ha oído del país vecino. El colmo de la estupidez reduccionista, simplista.


                                                      Carátula de la película "Bajarse al moro"

Hoy me gustaría contar una anécdota que viví en Marruecos hace tan sólo unos meses. Por casualidad conocí a un grupo de españoles que estaban recorriendo el país de punta a punta, en moto. Sí, estos "aventureros" se ponían sus trajes de motero con todas sus protecciones y tras unas horas en la carretera iban a descansar.... al mejor hotel de la ciudad. Eso sí, siempre seguidos por un camión enorme que les llevaba sus maletas y otras comodidades, y con el guía que les había organizado el viaje.
Así es, esta es la última moda: ir de aventurero- motero por el día (con unas pocas horitas está bien) y planchar la oreja en un hotelazo cinco estrellas. Amén de cenar en un restaurante caro. No seré yo quien diga que después de montar en moto esta gente no necesite una ducha decente y descansar en condiciones, pero entonces, amigos, olvidémonos de la "aventura"que estos individuos se jactaban de realizar.

Me les presentaron esa misma noche, pues unos marroquíes que había conocido hace unos días me avisaron de que trabajarían en turismo con ellos, que sería agradable para mí intercambiar experiencias.
Así que nada más conocerme y como colofón final a este gran día, se les ocurrió preguntarme (ya que yo era española, cómo iban a hacer ellos el esfuerzo de comunicarse en otro idioma) cómo podían conseguir hachís. Sí, está claro, si lo quieres no te quedes en tu pueblo: cruza el estrecho de Gibraltar, después farda de motito con tu cara de gilipollas en cuatro aldeas, ignora toda la cultura que tienes delante y luego pregunta por ello. Es fácil... ¿Cómo no te lo van a dar? ¿Cómo no, a tí? ¿No era este el paraíso de la droga? ¿Por qué no joder un poco más al país vecino sin tan siquiera preocuparte de cómo lo está pasando la gente que día a día te sirve en los hotelazos, en los restaurantes...?
No contentos con pedir esto (a mí me preguntaron, a los marroquíes casi se lo exigían) y en vista de que no estábamos por la labor de ayudarles, pidieron algo más. <<Bueno, ahora al llegar al hotel preguntaremos dónde están aquí la fiesta y las chicas>>. Date, date. Así que te vas a Marruecos a por droga, fiesta y chicas. Faltaría más que a tí, turista adinerado y cobarde te faltase algo de esto. Ni que decir tiene que jamás se les pasó por la cabeza pensar qué consecuencias podía tener para los marroquíes que les acompañaban en su viaje estar relacionados con tráfico de hachís, ni que en un país musulmán (en el que no se bebe alcohol a la ligera) no iban a encontrar la tasca del tío Antonio, especialidad en vinos, en la primera calle. 
Para estos estúpidos con dinero la ecuación estaba clara: cuanto más inversamente proporcional es el número de billetes con respecto a la inteligencia; más me creo con derecho a exigir en este nuevo lugar.

Y lo peor de todo ello no es ni si quiera el hecho de que consigan droga o no (que cada uno haga lo que quiera), ni siquiera que aparenten algo que no son, ni siquiera que se crean superiores, ni siquiera que no sepan leer un mapa ellos solitos.
Lo peor es que tras esta visión tan simplista que define a una cultura sólo como productora de droga, que cree que eso es lo único que puede ofrecer, se esconde algo mucho peor: el desinterés absoluto por conocer nada más, por mirar de verdad, por vivirla de verdad, por conocer su gente, hablar con ellos, conocer su historia y contarles la tuya, intentar verlo de forma objetiva, con lo bueno y lo malo, sumergiéndote en sus calles, en su vida diaria, respirándola de verdad.



                                             Artwork del conjunto de arte urbano Boamistura 

Sé que muchos de estos moteros (y muchos más que viajan como ellos) llegarían después a su casa enseñando las fotos de su "aventura": aquí en el desierto, esta de una ciudad, esta en la carretera.... y estoy segura de que sus familiares y compañeros de trabajo pensarán de ellos lo que ven. <<¡Qué tíos, qué valor, qué gran hazaña!>>. Son los que fardarán y fardarán, e incluso ellos mismos se creerán que han logrado un hito. Y sin embargo son los mismos que jamás se han interesado por descubrir algo más allá de su viaje organizado, son los mismos que nunca han intentado chapurrear "dariya" y ni de lejos son capaces de sentarse a comer y beber con un marroquí autóctono fuera de su circuito de hotelitos y buenos restaurantes. Han hecho un viaje sin enterarse, solo porque así estaba programado. Y lo peor es que nunca han querido ver más, se han regocijado en sentirse superiores y exigir mierdas: cosas absolutamente prescindibles para el viaje.

No pretendo que todo el mundo viaje con una mochila a la espalda, ésa no es la cuestión. La cuestión es qué sentido tiene faltar así al respeto, faltárselo a uno mismo perdiéndose lo mejor, dar palmas de alegría por ser ignorante y además sentirse orgulloso. Salir de tu país, de tu cultura, de tu círculo, para acabar haciendo lo mismo que haces allí. ¿Es realmente necesario?

Porque mientras sujetos como los de esta historia exigían estupideces a ciegas gastándose un dineral, el camarero que les atendía hablaba cinco idiomas, el de la recepción sabía más historia de España que ellos e incluso los comerciantes sabían más de la actualidad de nuestro país que ellos.

Y mientras sigamos con esta visión tan estrecha de la realidad, negando de antemano lo que los otros nos ofrecen, imponiendo de forma cínica y autoritaria nuestros caprichos; mal nos irá, por mucho dinero que se tenga para pagar esto o aquello. El dinero va y viene, pero saber buscar recursos y tener inteligencia no. 

22 oct 2014

MARRUECOS: EL SUEÑO EUROPEO

Soñar es gratis pero llevar a cabo esos sueños siempre tiene un precio.

Se puede soñar con realizarse, con viajar, con tener una vida feliz, o simplemente una vida mejor en la que uno tenga seguro que va a comer todos los días y que sus necesidades más básicas van a ser cubiertas con total seguridad. En Europa hemos aspirado durante 50 años a realizar el "sueño americano"; ése estilo de vida de que desde medianos del siglo pasado empezó a copar todos los medios de comunicación. 
La publicidad y en especial la televisión hicieron que una Europa en reconstrucción soñase con parecerse a ese modelo de familia feliz estadounidense, a una sociedad en la que el coche empezaba a ser un símbolo de status social y las mujeres disfrutaban de tener mil electrodomésticos para las tareas del hogar. Papá, mamá, los niños felices que consumen productos último modelo también, una casa en propiedad y un coche. Una vida cómoda y sin apenas preocupaciones, una vida de disfrutes infinitos, de consumo infinito, de seguridad infinita. Ése era el "sueño americano" al que emular en Europa y en cualquier parte del mundo a la que llegase la televisión.

Pero no sólo EEUU es un referente para soñar: en África, por proximidad, muchos sueñan con alcanzar el "sueño europeo". Miles de inmigrantes africanos que llegan a nuestras costas y puntos fronterizos cada mes, desde hace años,a pesar de la crisis, del frío del mar y a costa de poder perder la vida en el viaje. Aunque la mayoría proceden de países subsaharianos, en Marruecos tuve la sensación de que allí también sueñan con fuerza, sueñan a lo grande, sueñan con recorrer 14 kilómetros de mar para poner los pies en su sueño: Europa.

Sí, la decadente Europa, la de la crisis, la de los rescates y los PIGs... Esa Europa sigue calando en la imagen que los marroquíes tienen de lo que es la felicidad, una vida digna y completa. Cruzar a Europa es sinónimo de esperanza, de riqueza, de trabajo, y sobre todo de seguridad. Porque nada malo puede pasarte en Europa, ¿verdad?


                                                     Inmigrantes hacia las costas de Europa

Las historias de primos, amigos o amigos de amigos que consiguieron cruzar el charco y ahora se dan la buena vida abundan en las casas marroquíes. Muchos han ido a Francia, país ex colonizador, ya que allí no tienen barrera lingüística (en Marruecos el árabe y el francés son lenguas oficiales).
Pero por proximidad muchos llegaron a España también. Especialmente en la época del "pelotazo" español, ya se sabe: cuando se construía bueno, bonito y barato. Quería decir que bonito y barato. Más bien sólo barato. El número de inmigrantes creció como la espuma. Ávidos por cobrar nueve veces más de lo que ganaban en su país y aún sabiéndose en muchos casos absolutamente desprotegidos en lo laboral. Con ese dinero algunos han vuelto y se han construido su propia casa en Marruecos. Otros visitan a sus familiares cuando pueden y les llevan regalos desde España, les hablan de su nueva vida, de las ciudades españolas que les han acogido y de sus amistades.
Y también hay otros que han oído hablar de Europa de lejos, sobre todo por la televisión y en especial por el fútbol. Y es que la pasión por este deporte en Marruecos (en África en general) es impresionante. Algunas ciudades celebran una victoria del Barça o del Madrid como estuviesen en Barcelona o en Madrid.

Así que no es de extrañar que hoy muchos tengan la sensación de que España (y Europa por extensión) es una especie de paraíso, un lugar en el que los sueños se hacen realidad.
Es cierto que pese a la crisis las diferencias entre Marruecos y España (o Europa, que suele ser el "gran referente") son evidentes:las infraestructuras, tasa de alfabetización, igualdad de género,el peso de la religión, salarios más altos y más derechos laborales... y muchas otras que se aprecian a simple vista. Sin embargo, al otro lado del estrecho suele ensalzarse a Europa con una imagen de bienestar y riqueza que a veces roza la fantasía. Pero no es oro todo lo que reluce y en el cambio de continente se pierden muchas cosas, algunas irreemplazables. Aquí enumero algunas cosas que no responden a estos sueños "Disney" que idealizan la entrada en Europa. Conceptos que, a mi parecer, distan mucho de la idea de "El Dorado" que muchos marroquíes tienen de Europa:

-La familia: es el gran lazo que une a los africanos (y en Marruecos no es menos), la red que ayuda a sus miembros, por lo que estos nunca se sienten solos. Da igual si uno tiene trabajo y otro (u otros) no: todo se comparte y la solidaridad entre unos y otros es algo que nadie se plantea, se da por hecho.

-Otro concepto de lo que es la pobreza: muy unido con el anterior, ya que los lazos entre personas son importantísimos. Por supuesto que en Marruecos hay pobreza, gente que pide y situaciones extremas (por ejemplo la de las viudas) pero guiándome por lo que vi allí, hay también una protección social muy fuerte y se le intenta ayudar en la medida de lo posible. Si alguien viene, por ejemplo, pidiendo a un restaurante, lo más normal será que el camarero le dé algo que ha sobrado o que le trate con buenas formas; el hecho de ser pobre no impide este trato.

-Calidad y cantidad no son lo mismo: la necesidad de dinero en un país donde la mayoría de las familias tienen cinco u ocho hijos hace que los salarios se queden en nada para alimentar tantas bocas. Al cruzar a Europa el salario puede multiplicarse por diez pero los precios también lo harán. Por eso una vez alcanzada una cantidad de dinero en Europa muchos deciden volver a su país con lo que han ahorrado. De hecho mayoría de la gente con estudios superiores que conocí, conscientes de este hecho, han preferido quedarse en su país para tener mayor calidad de vida y no sólo ganar mas.

-Quimeras que son un negocio: puede sonar a película, pero lo cierto es que muchos ya han caído en sus redes. La desinformación y la falta de acceso a fuentes oficiales hace que miles de personas sean víctimas de las mafias. La prostitución, la esclavitud laboral o la miseria más absoluta son las realidades con las que casi siempre acaban chocando las víctimas con la promesa de cruzar a Europa. ¿Quieres ir  Europa con trabajo seguro y ganar muchísimo dinero? Familias humildes se dejan todos sus ahorros por que uno de sus miembros viaje al viejo continente para realizar sus sueños, que en realidad irán a parar a mafiosos y mercaderes de personas.
Precisamente de este tema trata la película "Diamanates negros" , sobre el negocio oscuro del fútbol en África y de cómo muchos son engañados con la promesa de hacerse ricos y famosos deportistas.


                                                      Trailer de "Diamantes negros"

Por otro lado está la presión social que tienen estos inmigrantes que han utilizado los ahorros de toda su familia y vecinos para lograrlo. Volver con las manos vacías sería el mayor de los fracasos. En el documental "Bienvenido Mr. Kaita" se analiza muy bien esta situación, cuando un hombre regresa a su pueblo natal en Gambia después de haber hecho "fortuna" en Europa.

No pretendo decir desde aquí que vivan mejor en sus países (eso es algo que cada uno ha de valorar), pero sí que tras ese espejismo de oro y fortuna rápida muchas veces se esconcen lágrimas y engaños en una sociedad muy distinta. Y sí, claro que hay algunos que lo han conseguido, claro que les hay que han conseguido ganarse la vida en Europa, aunque no sea siendo Cristiano Ronaldo ni conduciendo un Ferrari. Les hay que viven entre la indigencia y la precariedad más absoluta, les hay que han tenido más suerte, más contactos y se han estabilizado con trabajos mejores.
El sueño Europeo no deja de ser un sueño del que tarde o temprano hay que despertar, y se despierta en la realidad. Una realidad dura y que no se corresponde con la imagen idealizada que se tiene desde África.


15 ago 2014

COSAS QUE HE APRENDIDO GRACIAS Y A PESAR DE SER PERIODISTA

Hace sólo unos pocos años que me licencié, que puedo decir que "oficialmente" soy periodista. "Oficialmente": palabra que sirve para describir la realidad a la manera más políticamente correcta. Y es que creo que en estos años de crisis, de cambio por todos lados, de convulsión política y económica, de titulares que se centran en cómo estamos los jóvenes; me planteo qué he aprendido, si es que he aprendido algo por haber decidido dedicarme un día a esta profesión. Y no sólo eso. Voy más allá, porque ese es mi propósito a la hora de escribir esto. Me pregunto si he aprendido algo más desde que terminé esos "estudios reglados", cuál ha sido mi trayectoria, si es válida o no (faltaría más, el lastre de la comparación para medirnos en el mundo en que vivimos), si mis miedos tienen cabida o son inventados. Me pregunto qué sigo aprendiendo y en qué punto estamos (estoy yo también) quienes pertenecemos aunque sea falsamente a esa generación bautizada con la letra escarlata de "generación perdida".

No son consejos ni críticas hacia nadie en particular y hacia todo lo que me parece. Es una autocrítica y una palmadita en la espalda. No es nada personal, pero es muy personal para mí. Más que un diálogo es un monólogo a mí misma y mis circunstancias.

-Que el Periodismo es algo práctico y que por muchos estudios que se tengan vale más el hacer, hacer y hacer.

-Que ante todo se trata de saber comunicar, y que por mucho que se haya ido a una facultad hay gente que no tiene nada que ver con esta profesión y se explica mucho mejor en ciertos temas.

-Que hay mucho cara dura que quiere tener gente trabajando gratis o de becarios perpetuos. Que sólo depende de nosotros dignificar nuestro trabajo, y amigo; esto tampoco es gratis porque requiere mucho esfuerzo en seguir formándose, moverse, equivocarse y seguir adelante.

-Que la mayoría de los estudios relacionados con la comunicación (másters, cursos de especialización) son en realidad lecturas de libros y clases sin saber real ni conexión con la realidad. Eso sí, por el módico precio de un ojo de la cara.

-Que vivimos en un mundo de cambios brutales en todos los sentidos, y no sólo por la crisis. Hay que conocer el mundo digital. Hasta hace unos años muchos medios nacionales ni siquiera tenían página web y el "Communiy Manager" era alguien inexistente.Que hace años ser periodista implicaba tener acceso a unos medios de comunicación muy restringidos a la profesión, mientras que hoy cualquier persona con conexión a Internet puede informar de un suceso a tiempo real, tanto si lo hace bien como si lo hace mal. Que ya no existe ese monopolio para comunicar.

-Que nos guste o no, como periodistas o ciudadanos tenemos que mirar más allá de nuestras fronteras. Que no sólo cuestión de saber inglés, árabe o chino mandarían. El mundo está globalizado y lo que pase al otro lado del planeta te puede afectar a ti en unas horas. Y el periodismo es una herramienta preciosa para conocer esto.

-Que aunque nos cueste mucho aceptarlo en el fondo tenemos el periodismo y los medios de comunicación que nos merecemos. Si sólo salen los programas rosas en hora punta o los deportes (y no tengo nada en contra de ellos) es por que dan dinero.  Y si como ciudadanos y espectadores nos parece más cómodo mirar el gallinero de los programas rosas que saber cuáles son nuestros derechos, es nuestro problema. Ni más ni menos.Que a veces pienso que tanta crisis es sólo una excusa y que sólo llorar y quejarse no sirve de nada. Que no es cuestión sólo de corrupción o de crisis, de medios manipuladores sin escrúpulos... Porque sin una sociedad que mantenga todo esto, todos ellos se habrían caído hace ya mucho tiempo. 

-Que afortunadamente sí hay gente concienciada con pagar dignamente por un trabajo bien hecho. Al final la gente tiene que pagar por tu trabajo. Y aunque en esta sociedad hedonista creamos que tenemos derecho a tenerlo todo y tenerlo todo... ¡ya! y casi gratis, es mentira. Todo cuesta: a veces es dinero, otras es tiempo, otras es formación.Que el ser humano ante todo es creativo y se están inventando nuevas formas de financiar buenos proyectos interesantes.

-Que cuando veo el panorama pienso si no me hubiera rentado más hacer otra cosa más de provecho. Luego rememoro las razones por las que quise de verdad estudiar esto y sé que volvería a hacerlo de nuevo.

- Que cuando uno viaja por ahí se da cuenta de lo afortunado que es y la de oportunidades e ideas que se le ocurren. Que la gente que menos tiene es la que más agudiza el ingenio y suele ser la que menos necesita.  Que ahogarse en un vaso de agua es absurdo y vivir con miedo el peor de los males.

-Que dedicarse a esto, aunque a veces sea sólo de refilón te da la oportunidad de seguir aprendiendo constantemente y no parar, por lo tanto no hay lugar para el aburrimiento.

                                   "Aún aprendo", dibujo que Franciso de Goya realizó al final de su vida.

-Que la vida manda más que todo lo demás y que la educación no formal es la más importante.

                    Salvados : "Cuando luchas puedes ganar, pero si no luchas seguro que pierdes"

1 jul 2014

ALGUNOS PRECIOS REALES EN MARRUECOS

Marruecos tiene fama se ser un país barato para los europeos que lo visitan, un destino en el que se pueden encontrar verdaderas gangas a precio de saldo. Sin embargo todo depende mucho de cómo se viaje, qué se quiera comprar, dónde...
Así que a continuación voy a hacer una recopilación de artículos y sus precios basados exclusivamente en la experiencia de haber viajado durante un mes por el país con la mochila a cuestas. No servirá, por tanto, a quien esté pensando en hacer un viaje por Marruecos alojado en un hotel con pensión completa, ni para quien no escatime en gastos, ni para el que tenga un viaje programado con una agencia y acepte vivir en los lugares más turísticos y caros del país.

Para empezar: la moneda marrroquí es el dirham (DH). Para hacerse una idea del cambio, un euro equivale a 11 DH.
No hay que olvidar que en Marruecos la costumbre es regatear, por lo que estos precios son totalmente orientativos. Además en los lugares más turísticos (como Marrakech) a veces los precios pueden superar hasta 4 o 6 veces lo "normal". Así que lo que escribo a continuación es el resultado de lo que yo pagué en distintas ciudades. El sur y los pueblos, como casi siempre, son mucho más baratos que el norte y las grandes ciudades.

Los gastos básicos de cualquier viaje son comida y bebida, transporte y alojamiento, así que así empiezo:


COMIDA Y BEBIDA

-1 botella de agua de litro y medio 6 DH (Merece la pena, pues si no se bebe embotellada hay riesgo de tener gastroenteritis)
-1 botella pequeña de Fanta 7'5 DH
-Zumo de naranja (un vaso grande) 4 DH (En Marrakech hay muchísimos puestos por la calle)
-1 paquete de espaguettis 10 DH
-1 huevo 1 DH
-1 yogur 1 DH
-Pan (redondo) 1-2 DH
-Desayuno: café y bollo en bar local 6 DH
-Sopa Harira 5 DH
-Sándwich de pollo y vegetales con patatas 30 DH en los sitios más turísticos, 10 DH en los que menos.
-Tajín 40-50 DH, según lo que lleve (los puramente vegetales son más baratos).
-Cuscús 40- 50 DH. Al igual que el tajín el precio depende mucho de lo que lleve, y de dónde se coma. No es lo mismo es un restaurante para locales que uno en un sitio turístico.
-Cena para dos personas en puesto de la Plaza Djemma El Fna, centro de Marrakech: tajin de calamares, bebibas y otro plato 50DH
-Paquete spaguettis 10 DH


TRANSPORTE

-Aeropuerto Tánger al centro de la ciudad 100  DH
-Autobús Chef- Chaouen - Fez 70 DH
-Tren Fez- Marrakech 190 DH
-Autobús Marrakech- Ouarzazate 80 DH
- Seguro por guardar la maleta en la CTM, la compañía de autobuses mejor equipada 5 DH
- Tren Rabat- Tánger 110 DH

-Advertencia con los taxis: Si decidís coger un taxi pedir SIEMPRE al conductor que active el contador. Muchos taxistas se harán los locos, pero estáis en una ciudad turística se puede perfectamente esperar a otro taxi que sí lo ponga, ya que hay muchos. De lo contrario os exponéis a que os intenten cobrar precios desorbitados.


ALOJAMIENTO

HOSTALES
En las ciudades más turísticas suele ser muy barato en la parte de la medina. En Fez, por ejemplo, hay lugares por 80 DH la noche, y en Marrakech incluso por 55 DH con desayuno incluido. En algunos sitios se puede dormir en la terraza perfectamente. Casi todas estas opciones ofrecen además WI-FI. 
Dejo aquí el link del "Mama Marrakech" http://www.mamamarrakech.com/ , que ofrece precios muy baratos para mochileros.

ALBERGUES
En la mayoría de las grandes ciudades (Essaouira, Marrakech, Rabat...) está presente la Red Internacional de Albergues, "Hi Hostels", donde por unos 70 DH ofrece alojamiento y desayuno.

RIADS
Las medinas de Marruecos están plagadas de ellos. Son casas grandes, de varios pisos, con un bonito patio central La mayoría de ellas han sido reformadas de cara al turismo. Suelen pasar desapercibidas en las callejuelas abarrotadas de gente y a veces es difícil encontrarlas. En las calles principales suele haber muchos carteles indicativos sobre cómo llegar a ellos, pues muchos están "escondidos" entre la maraña de callejas y arcos de la medina.

No tengo experiencia personal en este tipo de alojamiento, pero algunos precios que consulté rondaban los 100 DH sin desayuno. Sin embargo, al haber tantos, merece la pena echar un ojo y preguntar precios.




9 jun 2014

LA CULTURA DEL MIEDO

Llevaba tiempo pensándolo, pero no suele ser hasta que una inicia un viaje, cambia de ambiente y de perspectivas y sobre todo se ve realmente válida para salir adelante, cuando lo puede confirmar.

La vida es una. Y en países más "pobres" lo saben muy bien. Que sin los demás no somos nadie y que no controlamos absolutamente nada.

Que vivimos con demasiado miedo en nuestras casas de cristal sin rozarnos con el mundo real, que es mucho más libre. Y que no es bueno estar así, porque en realidad nos perdemos la vida de verdad.

                                             <<Abre la ventana y que la brisa te acaricie la cara>>

Pero al viajar, cambiar de gentes, ver otras costumbres y otras formas de tomarse la vida me he dado cuenta de que cada día debía confiar en algo, en desconocidos la mayoría, y sobre todo, no estar parada. Porque el miedo, paraliza.

El miedo se ha instalado en nuestra cultura, en nuestra forma de vida, en la de pensar también.  A pesar de creer que somos más libres que nunca por tener todos los medios a nuestra disposición, tener más formación que la que tenían nuestros abuelos o poder desplazarnos más fácilmente, tenemos miedo. 
Nuestra cultura respira miedo por los cuatro costados, y eso es algo que choca mucho al viajar a lugares que, desde aquí, siempre hemos considerado subdesarrollados, pobres, peligrosos... Todo esto, por supuesto, se traduce también en el pánico a los que son diferentes, o lo que es peor, el cerrarse directamente a tan siquiera conocer lo que es distinto, en vivir cómodamente a través de una pantalla, de la tele o de la radio, escuchando de forma pasiva cómo nos cuentas que es el  ese mundo en el que ahora nos podemos mover con más facilidad.

Durante el mes que he estado en Marruecos (vuelvo a repetir que es un tiempo absolutamente insuficiente para conocer algo a fondo) no he visto que la gente viva con el mismo miedo con el que vivimos aquí, en general. Tienen otros miedos, es cierto. Y otras condiciones de vida, muy duras algunas. Pero parece mentira que para todas las comodidades y oportunidades que tenemos, seamos incapaces de vivir realmente en paz y de forma coherente con lo que pensamos. De apreciar y valorar. Me sorprende ver que la tasa de depresiones se dispara en los países ricos. 

En "El miedo a la libertad" Erich Fromm exponía varios mecanismos de evasión que ha creado nuestra sociedad para seguir siendo esclava, porque ser libre implica tener una responsabilidad.

Por otro lado no es de extrañar. El sistema económico y social en el que vivimos, que tiene por objetivo comprar y comprar sin pensar en nada (¡sin pensar en nada!), necesita realmente al miedo como motor de sí mismo. También es una forma de que la gente se quede en casa pensando que más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer.
Porque si no tienes miedo a ser menos que tu vecino, entonces  no te endeudarías hasta las cejas para comprar ese todoterreno último modelo. Porque si las mujeres occidentales no tuviesen miedo a ser rechazadas por no parecerse Angelia Jolie, tampoco gastarían en antiarrugas, ni en pastillas adelgazantes, ni en montañas de ropa cada año. Porque si esa familia que tiene pocos ingresos no tiene miedo a ser etiquetada por los demás, no tiraría el dinero para aparentar. Quién sabe, tal vez sin miedo nos daría por pensar.Y puede que sin tantas cosas, nos quedase hueco para sentir.




6 jun 2014

VIAJAR SOLA A MARRUECOS

El título lo dice todo: viajar sola (una y en femenino: o sea, una mujer) a Marruecos.

¿Es peligroso? Esa es la gran duda que creo que asalta a cualquier viajera que quiera ir allí en estas condiciones. Todo lo que escribo a continuación es fruto de mi experiencia, así que que nadie lo tome como una verdad absoluta, pero creo que puede ser de ayuda a quienes estén pensando en hacer lo mismo.

Antes de viajar escribí un montón de veces esta frase en Google, y me di cuenta de que muchas más mujeres como yo buscaban una respuesta, y pocos eran los sitios en los que se encontraba el testimonio de alguien que hubiese estado ya y tuviese una experiencia personal. La mayoría de las búsquedas sobre esta cuestión acaban en foros de Internet donde gran parte de la gente aconseja desde el desconocimiento y basándose en estereotipos.

                                Vista de Chefchaouen (Marruecos)


Tuve la suerte de poder contactar con otra bloguera, Bárbara Bécares, quien en su espacio online, "Bárbara on the road"https://unviajedemilesdekmempiezaconunpequenopaso.wordpress.com/ narra su experiencia, entre muchas otras, viviendo siete meses en Marruecos. Le vuelvo a dar las gracias desde aquí por sus consejos y contactos. Sinceramente, tranquiliza mucho saber que al menos quien te habla sobre un sitio ha estado allí, y no precisamente de vacaciones en un hotelito una semana. Durante el viaje también conocí el blog de Carlota Miranda, "No es nada personal"http://notelotomescomoalgopersonal.blogspot.com.es/ otra chica española que estuvo trabajando en Rabat después de haber viajado varias veces al país vecino, tras, según ella, haberse enamorado del país.

Pero volviendo a la cuestión central, y una vez habiéndolo vivido, lo cierto es que NO, viajar a Marruecos no es peligroso. Es seguro, o al menos todo lo seguro que puede vivir uno en cualquier pueblo de España o en Madrid. Quiero decir que nadie te va a garantizar que no te vaya a pasar nada, al igual que nadie te garantiza que no te pase aquí. Pero no te van a poner un burka (yo nunca me cubrí el pelo), ni te van a cambiar por un camello, ni te van a agredir por que sí... Ni ninguna de esas ideas preconcebidas. Por supuesto que locos y mala gente hay en todos los lados y tampoco es oro todo lo que reluce, hay que ir con cuidado con los desconocidos y tener sentido común. Sobre todo esto último, igual que lo tenemos aquí y no nos metemos en barrios peligrosos ni nos relacionamos con quien nos da mala espina.

Repito: viajar sola a Marruecos es seguro... pero debo reconocer que también puede ser incómodo. Una mujer "occidental" (o que lo aparente por su vestimenta, aunque ésta no sea llamativa), joven y sola llamará la atención, sobre todo de los hombres, y esto sí se puede hacer pesado. En los lugares turísticos esta atención es doble porque al hecho de ser una mujer se le suma que eres una cliente potencial de cualquier cosa (y es que venden cualquier cosa).
Por lo general los hombres marroquíes a penas han tenido ocasión de relacionarse o conocer un poco en profundidad a una extranjera... Y en mi opinión (es sólo mi opinión) creo que suelen pensar que una extranjera es más "fácil" que una local, y que no tendrán que hacer tantos rituales para conquistarla. Esto puede llegar a sacar de sus casillas a cualquiera. Mi recomendación es ignorarlos completamente, como si no existiesen. No quiero decir con esto que todo el que vaya a hablar con una turista tenga esta intención, ni mucho menos, pero si realmente es así, recomiendo no empezar a tener ninguna conversación con ellos.

                                                  Calle de la medina de Fez

Durante todo un mes tan sólo tuve una mala experiencia de este tipo, precisamente con un hombre que salió de un coche pidiéndome que me tomase un café con él. No pasó nada, y aunque me dio impresión no dejé que marcase mi idea del viaje ni del país, porque toda la gente que he conocido y me ha ayudado (también hombres) supera esto con creces.

Creo que hay que evitar ir con la idea preconcebida de que "no me van a dejar en paz", "voy a llamar mucho la atención" o "mejor no voy".
Puede que estas cosas pasen, y que llames la atención, pero .. ¿por qué añadir más estrés y mala leche a una situación nueva? Por otro lado en Marruecos la seguridad del turista está bastante garantizada.

También quiero añadir que cuando una se plantea viajar sola, en realidad, casi nunca se está sola. Siempre acabas conociendo gente, otros viajeros, personas en los albergues, locales... que te ayudan o se convierten en compañeros de viaje. La gente suele ser hospitalaria y protectora. Es fantástico conocer tanta gente distinta con la que sabes que estás compartiendo momentos y lugares que quién sabe si volveréis a visitar.

Si es la primera vez que se viaja al país, por mi experiencia recomendaría acercarse poco a poco. Tal vez primero hacer un viaje de unos días, una semana. Luego quedarse un poco más. Ir conociendo poco a poco a la gente, las costumbres... Pero cada uno es muy libre de hacerlo como quiera, yo de hecho me he ido un mes "de golpe y porrazo" y por eso aconsejo más esta otra opción.Me ha encantado el viaje pero tengo que reconocer que puede hacerse muy cansado porque Marruecos es un país que ofrece un  contraste tras otro, situaciones que en Europa no solemos vivir, y como para todo, hace falta tiempo para acostumbrarse. Y si no, si uno se decide por estar más tiempo; hay que tomárselo con calma para asentarse y conocerlo poco a poco, entrar en contacto con las costumbres (las de verdad, no las del turisteo), con la gente, con las ciudades... E incluso, por qué no, aprender algo de "dariya", el dialecto árabe marroquí.

En otros post me gustaría explicar más sobre otros aspectos del viaje, tales como la moneda,los precios, costumbres o sitios más conocidos. Pero eso merece una entrada aparte. Por si os ayuda, aquí dejo algunas referencias de testimonios que encontré en Internet, de blogueras que han viajado solas y hacen sus recomendaciones:

-"Viajar sola por Marruecos" (Bárbara on the road, blog de Bárbara Bécares)

-"¿Es peligroso viajar chicas solas a Marruecos?" (No es nada personal, blog de Carlota Miranda)

-"Guía para viajar de mochilero por Marruecos" ("Viajando por ahí", blog de Aniko Villalba)


29 may 2014

Y TÚ, ¿POR QUÉ VIAJAS?

Ya lo tenía claro cuando me lo preguntó el vendedor de alfombras en Aït Benhaddou. Sabía la respuesta porque había estado pensando sobre ello mientras viajaba en el tren o en el autobús, durante varios días.

Hablando sobre la prisa de los europeos, él me había preguntado que porqué viajaba. Y es de hecho una muy buena pregunta.

Viajo para conocer más y porque creo que mi educación aún no ha acabado. Porque creo que es muy importante vivir en la realidad, y para eso hay que conocerla. Porque, como todo en esta vida, si no eres tú el que se preocupa por conocer y por hacer, siempre acabará habiendo alguien o algo (puede ser la tele, un amigo de un amigo, una película) por medio del cual acabes "viviendo" esa realidad. Habrá alguien que te lo cuente y te diga cómo es, para bien o para mal. Pero así nunca podrás sentir lo que es caminar por aquellas calles estrechas, ni oler ni degustar la comida, ni maravillarte por que el autobús te ofrece un paisaje de cuento por su ventanilla y sentir que tienes suerte por poder disfrutarlo.

Creo que pocas cosas enseñan tanto como viajar, a pesar de que la mayoría de la gente que conozco se ha lanzado a hacer segundas carreras, másters (hay quien acumula tres) u otros estudios superiores, pensando que van a estar más preparados para manejarse en este mundo.
En primer lugar, y de modo práctico, por los idiomas que aprendes, porque no te queda más remedio.
También es fascinante darse cuenta de lo pequeño que es tu mundo. No hablemos ya de la gente que conoces y de las historias que hay detrás. 


Y porque detrás de estas bonitas y profundas palabras se esconde (y ahora lo muestro) mucha dificultad e inadaptación. Viajar no es fácil. Y eso es parte de la clave, porque sin ello no habría aprendizaje. Vivir situaciones que te chocan y causan repulsa al principio, conocer gente hacia la que antes, no nos engañemos, tenías ciertos prejuicios. Vivir en lugares que no son cómodos, donde puedes echar en falta una simple ducha durante días mientras sudas lo inimaginable. Conciliar el sueño en trenes y autobuses o estar alerta ante desconocidos.

Rendirse a que no te queda más remedio que adaptarte a algo que no conoces y que sin embargo, consigues conciliar con tu vida. Y que no pasa nada, todo sigue adelante.

Viajo porque salgo más fuerte y desarrollo mis capacidades al máximo. Viajo para enfrentarme, aunque sólo sea a mi manera, a lo que hay, a pesar de que no siempre es posible ni bonito. Viajo para que no me lo cuentes tú, ni aquél, para no conocer la vida a través de una pantalla, para evaporar todo lo que pienso y volverlo a construir. Viajo para vivir la realidad.

Viajo en realidad para no tener miedo.

                                                  La Koutubia, mezquita de Marrakech (Marruecos)