-De un de esti? (¿De dónde eres?)
-Din Spania (De España)
-Din Spania...Si ce faci în România????? (De España..¿Y qué haces en Rumanía?)- Cara de sorpresa e incredulidad.
Es una de las conversaciones que más he repetido en los últimos meses. En el tren, con los vecinos, con los jóvenes, en la cafetería...Todos se preguntan lo mismo. Rumanía. Pero, ¿porqué Rumanía? Todos los rumanos se van a España y tú vienes aquí...De ce? (Porqué?)
La mayoría me habla acerca de sus familiares que trabajan en Francia, en Alemania, en España... y al preguntare si a tí te gusta Rumanía, se sorprenden al responder que sí.
A veces me impresiona la baja consideración en que los propios rumanos tienen a su país, a su cultura, a su gente en general. Sé que ellos no son los únicos (en el llamado "Occidente" europeo se piensa lo mismo de esa chusma de gitanos inmigrantes que los medios suele mostrar como representación), pero choca que ellos mismos tengan una imagen tan pobre de su país mientras idealizan otros que consideran más desarrollados.
Atardecer
Sí, es cierto que junto con Bulgaria es el país más pobre de la Unión Europea. Que el salario medio de un profesor, por ejemplo, es de 200 euros. Que muchas ciudades no están limpias y hay mucha contaminación, aparte de estar en reconstrucción. Que muchas están llenas de perros callejeros. Que no hay una infraestructura de trenes y carreteras buena. Que el pasado comunista (con sus luces y sombras) aún sigue pesando en la sociedad. Que la Administración sigue teniendo grandes dosis de corrupción...Sí, es cierto. Y en estas condiciones es normal que la población rumana decida migrar a otros países en busca del sueño mileurista (difícil conseguirlo ahora) para ofrecer un futuro mejor a sus hijos.
Sí, es cierto que junto con Bulgaria es el país más pobre de la Unión Europea. Que el salario medio de un profesor, por ejemplo, es de 200 euros. Que muchas ciudades no están limpias y hay mucha contaminación, aparte de estar en reconstrucción. Que muchas están llenas de perros callejeros. Que no hay una infraestructura de trenes y carreteras buena. Que el pasado comunista (con sus luces y sombras) aún sigue pesando en la sociedad. Que la Administración sigue teniendo grandes dosis de corrupción...Sí, es cierto. Y en estas condiciones es normal que la población rumana decida migrar a otros países en busca del sueño mileurista (difícil conseguirlo ahora) para ofrecer un futuro mejor a sus hijos.
Todo esto es cierto. Y también lo es que Rumanía es mucho más que esto.
NO SON GIGANTES...¡SON MOLINOS DE MENTIRA!
NO SON GIGANTES...¡SON MOLINOS DE MENTIRA!
Los rumanos tienden a ver su país como el hermano pequeño de Europa, el inexperto, el hermano tonto que tiene que aprender bien la lección del grande...y así algún día podrá convertirse en un gigante, en unos de los grandes, de los poderosos. Los pobres rumanos aún no han aprendido cómo deslumbrar. Alguien tiene que enseñarles.
Tras la caída del comunismo en 1989 empezaron la transición hacia la democracia. No más cartillas de racionamiento, se abrían las puertas a poder viajar sin dar tantas explicaciones, la libertad les estaba esperando. Y la posibilidad de crecer, de avanzar, de ser un gigante...
18 años después (en forma de metáfora se diría que cuando los rumanos ya eran "democráticamente" mayores de edad), en el año 2007 entraron en la Unión Europea. Por fin. La organización que se formó en la época de la Guerra Fría en el bloque capitalista admitía a los hermanos rumanos bajo su protección, les perdonaba su pasado comunista y les enseñaba todos los pasos a seguir para desarrollarse y convertirse en un gigante.
Ser un gigante...¿De qué?
Gigante económico, gigante tecnológico, gigante cultural, gigante a la vanguardia de todos los adelantos del "mundo civilizado". Un gigante como Alemania, como Francia, como España. Hay que soñar y preparase para ser como ellos ( y apretarse el cinturón si es necesario): tener su educación, su sistema sanitario, su economía (jajajajaja)...
Don Quijote se batía en duelo con los molinos...Él creía que eran gigantes
¡Que vengan a invertir empresas a bajo precio! ¡Que venga el turismo al Mar Negro! ¡Arriba con los oleoductos! ¡Que nos den préstamos desde el FMI! Aunque sea peor el remedio que la enfermedad, preparémonos para entrar en el euro....
Don Quijote se batía en duelo con los molinos...Él creía que eran gigantes
¡Que vengan a invertir empresas a bajo precio! ¡Que venga el turismo al Mar Negro! ¡Arriba con los oleoductos! ¡Que nos den préstamos desde el FMI! Aunque sea peor el remedio que la enfermedad, preparémonos para entrar en el euro....
El progreso, sin duda, estaba asegurado. O no. Hasta que la crisis global, originada por el mismo sistema al que Rumanía insiste en entrar sea como sea, empezó a hacerse notar y sus consecuencias también, como la famosa bajada del sueldo de los funcionarios un 25%.
Pero no son estos datos la base del problema. La crisis pasará, en Rumanía y en España, y si siguen así las cosas vendrán tiempos de bonanza (basada en la especulación otra vez) que originarán, años después, otra crisis aún más catastrófica que esta. Papá Ceaucescu, el dictador, desapareció de escena en 1989, como casi todos los del Este de Europa, pero eso no significa que se quedasen huérfanos. Ahora es mamá Angela Merkel desde Alemania (velando por sus intereses como Consejera Delegada que es del Deuche Bank), quien toca la batuta de esa orquesta de lujo llamada Unión Europea. Una orquesta cuya unión, como se está viendo, no se basa en la solidaridad de unos países con otros, sino en el interés propio, concretamente el económico.
<<Nosotros, los rumanos, vemos a España y al resto de Europa como alguien a quien nos queremos parecer, pensamos que allí las cosas funcionan...>>, me suelen decir.
No saben, sin embargo, que la tasa de paro en España es mayor que que hay en Rumanía. En realidad es la mayor de toda la Unión Europea. Que aunque muchos jóvenes españoles salgan de la Universidad muy bien preparados, la mayoría no saben inglés (algo tan básico para comunicarse en un mundo globalizado), mientras que aquí incluso el tendero ha aprendido algo viendo películas subtituladas en cualquier cadena de televisión. La mayoría de los jóvenes rumanos habla inglés casi sin problemas por esto, y en muchos casos otras lenguas (las chicas casi siempre español, por las telenovelas...)
¿Desarrollo en España? Que vengan a ver la costa del mediterráneo, cuna del turismo, el motor económico del país junto con la especulación inmobiliaria. En nombre del desarrollo: construcción, construcción y construcción.
¿De verdad querrán los rumanos que la costa del Mar Negro (única salida al mar que hay en país, aunque éste sea interior) acabe así?
Playa de Constanza
No creen que en países como España el respeto hacia las personas mayores se esté perdiendo. Aquí es común saludarle diciendo <<Sarut mâna>> ( <<beso su mano>>), una forma de mostrar respeto y amabilidad. En algunas zonas del país este saludo se reserva sólo a las mujeres. Incluso algo tan insignificante como el Día de la Mujer se vive como una tradición nacional, en la que los cafés y restaurantes se llenan de féminas dispuestas a celebrarlo juntas pasando la tarde. Otras costumbres, como la celebración de la llegada de la primavera, demuestra que aún se tiene conciencia de que no todas las estaciones son iguales y por razones obvias de la vida en el campo ésta es especial.
¿Desarrollo en España? Que vengan a ver la costa del mediterráneo, cuna del turismo, el motor económico del país junto con la especulación inmobiliaria. En nombre del desarrollo: construcción, construcción y construcción.
¿De verdad querrán los rumanos que la costa del Mar Negro (única salida al mar que hay en país, aunque éste sea interior) acabe así?
Playa de Constanza
No creen que en países como España el respeto hacia las personas mayores se esté perdiendo. Aquí es común saludarle diciendo <<Sarut mâna>> ( <<beso su mano>>), una forma de mostrar respeto y amabilidad. En algunas zonas del país este saludo se reserva sólo a las mujeres. Incluso algo tan insignificante como el Día de la Mujer se vive como una tradición nacional, en la que los cafés y restaurantes se llenan de féminas dispuestas a celebrarlo juntas pasando la tarde. Otras costumbres, como la celebración de la llegada de la primavera, demuestra que aún se tiene conciencia de que no todas las estaciones son iguales y por razones obvias de la vida en el campo ésta es especial.
Suelen decir que los jóvenes sin incultos, estúpidos, que no ayudan a nadie... Se sorprenden si les digo que en muchos colegios españoles (y me consta que en otros países considerados más desarrollados también) los profesores no tienen autoridad. Que estoy muy sorprendida porque me parece que aquí los niños y adolescentes hacen muchas actividades extraescolares y son bastante educados en comparación con España... Que allí sus modelos a seguir son los concursantes de Gran Hermano y otras analfabadas por el estilo. Y por no querer perder el tiempo me he ahorrado hablarles de Belén Esteban...
Tampoco conciben que de media la gente se vaya de casa de sus padres a los 34 años, teniendo los medios para hacerlo.
Ni se imaginarán que en la mayoría de las localidades españolas poco queda de esos mercados fijos (Piata) en los que comprar legumbres y verduras frescas, queso, huevos miel...Productos que el consumidor puede oler, tocar, a veces incluso hasta probar antes de comprarlo, y cuyos beneficios van a parar más directamente a quienes lo producen, por el hecho de no tener a penas intermediarios. El queso huele a queso: hay Telemea, Cascaval...¿cuál quieres, con sal o sin sal? Los tomates saben riquísimos, y en verano la variedad de vegetales es espectacular.
Alucinan si les digo que en España apenas se hacen bebidas caseras (muy raramente y sólo en los pueblos), como el vino o la Palinka artesanal que es tan habitual aquí. O cuando les cuento que especialmente en las grandes ciudades muchos niños no saben que la leche viene de las vacas, las frutas de los árboles, los huevos de las gallinas...En Europa del Este, en general, la gente vive en mayor contacto con la naturaleza, y quien más y quien menos, por muy modesta que sea su casa vive rodeado de ella. Se dirá por supuesto que esto es fruto de la miseria que padecen, los pobrecitos no tienen coches las aldeas y por eso van en carros tirados por caballos. Pero los animales no les son extraños, molestos, o como suele pasar el los países desarrollados, considerados casi antinaturales.
Por supuesto, Rumanía no es jauja. No quiero decir con esto que aquí se viva mejor que en ningún sitio ni que no deban querer "avanzar", tener más medios para dar un futuro mejor a sus hijos, tener una casa más moderna, las calles limpias, un sistema sanitario que funcione sin problemas y dinero en los bolsillos. Pero creo que deberían conocer mejor hacia dónde van y qué consecuencias va a tener ese tipo de desarrollo.
¿Tan importante es seguir los dictados de ese Occidente en crisis que confunde ciudadano con cliente?
El trato de desprecio hacia todo lo que no es occidental es patente. Aunque no tenga sentido. Desde Occidente hacia el resto de países. Y en Rumanía también.
El trato de desprecio hacia todo lo que no es occidental es patente. Aunque no tenga sentido. Desde Occidente hacia el resto de países. Y en Rumanía también.
Por eso a veces me pregunto quién tiene que aprender el qué...y de quién.